“Más que carriles exclusivos, por la infraestructura colonial que tiene San Miguel de Tucumán, se necesitan arterias exclusivas”, consideró Jorge Berretta, vicepresidente de la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (Aetat). Sin embargo, recordó que cuando se lanzó el programa, en 2018, lo consideró positivo pero con la condición de que sean dos los carriles exclusivos por vía, para permitir que los colectivos puedan sobrepasarse.
“Cuando uno sube al colectivo quiere llegar rápidamente a destino. Un usuario de Tafí Viejo que viaja hasta el centro de la capital podría ahorrar 12 minutos con estas medidas. Si se ahorra ese tiempo cada mañana, hará que más gente se incline por el colectivo. En todo el mundo se generan prioridades para el transporte público; ya sea con calles exclusivas, carriles o metrobuses. Siempre en pos del medioambiente”, continuó Berretta.
Para dar agilidad a los colectivos, no se podrá estacionar en seis callesAdemás, consideró que “un colectivo contamina igual que un auto, pero viaja muchísima más gente. Si esto se aplica, se mejoraría el tránsito, sería más eficaz el colectivo y a la larga, al reducir el tiempo por vuelta del recorrido, se morigerarían las tarifas porque se reducirán los costos fijos que deben cubrir las empresas para cada recorrido”.
“Hay muchos estudios de la municipalidad realizados que apuntan a esto, es necesaria la decisión política. La gente se va a dar cuenta del impacto porque viajará en menos tiempo”, finalizó.
Poca expectativa
“Mirá, cualquier cosa que hagan no va a servir si no se controla que se cumpla. Sobre todo, la municipalidad tiene que controlar más a las empresas para que cumplan con la calidad del servicio”, consideró Catalina Jerez, quien esperaba el 12 ramal Municipal en la General Paz. “Si se viaja más rápido y ayuda a hacer más ágil el tránsito, bienvenido sea que se avance con los carriles exclusivos, pero no puede ser que haya tanta diferencia entre líneas: el 9 tiene buena frecuencia y el 3 y el 103 los tenes que esperar casi media hora y los coches están destrozados”, agregó la mujer del barrio Floresta, que retiró unas órdenes y partía busco a la farmacia.
En la esquina de General Paz y Ayacucho, algunos taxistas tomaron sin demasiado entusiasmo el anuncio de avanzar con la prohibición de estacionar para liberar un tercer carril. “Acá somos todos hijos del rigor, no servirá si no se controla. En 2018 pintaron el carril exclusivo, pusieron algunos carteles, pero no delimitaron ni hubo controles. Lo mismo pasa con nosotros, los taxis: no hay controles por fuera de las cuatro avenidas y por eso es que hay tantos taxis truchos en los barrios”, consideraron Fabio, Rodrigo y Juan Pablo.
“Si se puede viajar mejor, aleluya que el municipio haga algo. Depender del colectivo para trabajar o hacer trámites, salvo algunas líneas, es tortuoso”, afirmó Mariela Juárez, que esperaba el 7 en la Córdoba.